Los Recuerdos del Porvenir

Escritura epi-olmeca
Estela C de Tres Zapotes, Veracruz 7.16.6.16.18

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Fechas. Tiempo. Memoria. Nuestra reflexión esencial en este Informe.

Querer enteder el sentido del tiempo. Desde Oaxaca, según está antigüedad. Pero con la intención de comprender mejor el presente. Nuestro presente. Nuestra identidad.

Por eso todo esto.

Cuando llegamos a un límite. Por la política.

Recordamos que la cuenta larga del calendario maya, según parece, habrá de concluir el día 21 de diciembre de 2012. Dentro de menos de cinco años. En ese solsticio de invierno. Y eso conecta de inmediato con la Piedra de Estrellas y Jalieza.

No creemos en el mito del "factor maya". Demasiado pueril --un bostezo New Age más. Pero la cosa pega de todos modos con esa fecha y esa mitología, con esas ilusiones. Un final de ciclo, la esperanza de un tiempo nuevo. Un nuevo sol. Y así sucesivamente. Por ahí puede llegar mucha gente a Jalieza y ver en la Piedra de Estrellas otro signo de sus "profecías". Bien se puede llegar a creer que allí está representado el cielo nocturno de esa noche todavía por venir. No vemos un cielo del tiempo pasado, ni un cielo imaginario, sino un cielo del futuro. El estudio astronómico lo hace perfectamente posible. Aunque sólo sea como ciencia-ficción.

Para nosotras es otra manera de desprendernos del objeto de este Informe. Enfrentando, ahora, la cuestión del mito y las ideologías. Esa sombra que tanto pesa sobre México, Oaxaca y Jalieza. Nuestro subdesarrollo católico a la española, una trampa que sobredetermina hasta nuestros saberes reales sobre el mundo anterior a Hernán Cortés. Que es con lo que más suele confundirse Oaxaca.

Con ese mundo indígena muerto que tanto pesa en nuestra conciencia, hasta hacer invisible e inaudible la realidad del mundo indígena actual, que, entonces, resulta fácil de enajenar por cualquier fenómeno del espectáculo. Pues de ese modo, desde tiempos de Sor Juana, los que no son indígenas se inventan un gran pasado indígena, algo cien por ciento imaginario, irreal, inventado, sin fundamento. Que quienes hoy hablan una lengua "indígena" conectan directamente con quienes hablaron lenguas "indígenas" hace miles de años. Pura ilusión, pura invención.

Por ejemplo, como hemos visto, en Jalieza ya casi nadie habla lengua zapoteca. Y quienes la hablan casi nada saben sobre el mundo indígena antiguo, todo lo especulan desde la distancia judeocristiana que nos envuelve. De hecho, muchas de esas personas consideraban como idólatras e ignorantes a los antiguos zapotecas. Nadie puede entender los signos escritos en sus piedras antiguas, y son muy poco/as quienes se preocupan por ello.

Más complicaciones, hasta donde podemos entender, la comunidad de Santo Tomás todavía no se da plena cuenta del modo cómo depende del turismo. Bueno, tal vez ya la pesadilla del pleonasmo "populárico" que secuestró el centro histórico de la capital ha logrado hacerles ingresar en la realidad. Si no hay industria, ni agricultura, la economía política del valle central depende por completo del turismo y los servicios. Cada vez habrá más turistas por ahí. Aunque, bueno, quién sabe, cosas como el pleonasmo ése son capaces de acabar de verdad con todo de un golpe. Entonces, esas piedras antiguas de Jalieza pronto pueden convertirse en una gran fuente de ingresos para la comunidad, nada más por la cantidad de gente que pueden atraer. Por el mito y contra el mito.

¿Seá importante tratar de saber y decir la verdad historiográfica de esas piedras?

Desde nuestro punto de vista, sí. Será crucial. Así podremos construir de verdad un nuevo sentido de México, más democrático y realista, más justo y equitativo, luego entonces: más universal.


Porque nos encarcelan los muertos. Nos tienen encerrados en su orden simbólico. De ahí la importancia de pensar el futuro como es. La importancia de saber situarnos ante el tiempo, reconocer nuestra resposabilidad.